Jamás te sientas dubitativo entre la palabra albertina y el término alberrtina cuando te veas en la necesidad de escribir, ya que solamente hay una forma viable para escribir este término adecuadamente, y es: albertina. La palabra alberrtina sencillamente no corresponde a ninguna palabra que se encuentre en el diccionario de la RAE.
Además quisiéramos, sugerirte una práctica muy útil para que memorices y recordar de forma definitiva cómo se escribe de modo correcto la palabra albertina, y nunca más regresen a ti las dudas entre sí este vocablo se debe escribir con ‘b’ o con ‘v’. El consejo se basa en elaborar una oración simple con la palabra albertina, que incluya al final de la misma ‘con b’ o ‘con v’, dependiendo de si la forma correcta de escribir la palabra es con o con ‘v’. De esta forma siempre te acordarás, te aseguramos que es infalible.
Cuando es seguida por las letras ‘r’ o ‘l’
brezo, brasas, blindado, bloqueado, amigable, bravío.
En aquellas palabras en que sigue a una letra ‘m’
bombo, bambas, ambigüedad, cambado.
En las palabras en que nos encontramos con los prefijos bi-, bis-, sub-
bífida, bisabuelo, subcomandante
En aquellas palabras que comienzan por bur-, bus-
burda, busquéis
En los casos en que las palabras terminan en -ble, -bilidad, -bundo, -bunda.
doble, fiabilidad, cogitabunda, sobreabundo.
EXCEPCIONES: movilidad, civilidad, que son derivados de móvil y civil
En aquella palabra que comienza por bien- o empieza con la forma latina bene-, con la condición de que conlleve un sentido de bueno, bondad.
bienvenida, benéfico.
En los casos en que se trata de un tiempo verbal copretérito de los verbos de la primera conjugación, aquella que acaba en -ar. Esto también sucede en las formas verbales del verbo ‘ir’ en este mismo tiempo
amaba, íbamos contábamos.
Si nos encontramos ante una forma verbal, con un infinitivo que acaba en -buir, -bir, -ber.
contribuyes, atribuyeron, recibirás, bebes.
EXCEPCIÓN: hervir, servir, vivir, ver, absolver, atrever, prever, volver, mover y sus derivados.Cuando precede a de ‘b’, ‘d’ y ‘n’.
subvencionar, convida, adverso.
En los casos en que la palabra empieza con eva-, eve-, evi-, evo-.
eventualidad, evita, evoques, evasivos.
EXCEPCIÓN: ébano, ebanista.
En los casos en que la palabra empieza con las sílabas di-, le-, sal-, cla-.
levemente, clavicular, diversidad, salvajada.
EXCEPCIÓN: La palabra ‘dibujar’ y sus derivados.
Si nos encontramos con una palabra que comienza por vice-, villa-, div-
vicésima, villanas, dividida.
EXCEPCIÓN: billar, bíceps, dibujo y sus derivados
Cuando debemos escribir adjetivos que terminan en -avo, -ava, -evo, -eva, -ivo, -iva
vivo, octavo, longeva, activa, suevo, lesivo.
Cuando se trata de palabras que acaban en -ave, -eve. Excepto las de origen árabe
leve, ave.
Cuando la palabra es una de las formas del pretérito de subjuntivo e indicativo de los verbos ‘tener’, ‘andar’ y ‘estar’.
anduvo, estuviera, tuviesen.
Cuando la palabra consiste en alguna de todas las formas del presente de indicativo, imperativo y subjuntivo del verbo ‘ir’.
van, vamos,.
Cuando sigue a ol-,
polvos revolver.
La confusión entre la letra ‘b’ y la letra ‘v’ es uno de los errores más normales en español. Por eso muchas personas vacilan, y no saben si se debe escribir albertina o si lo correcto es escribir alberrtina. Indagando un poquito, podemos encontrarnos con que este tipo de confusiones entre ‘b’ y ‘v’ ya pasaba en el latín y en aquellas lenguas romances derivadas de él.