Nunca jamás debes dudar entre benignidad y el término venignidad cuando te veas en la necesidad de escribir, debido a que tan solo existe una forma posible de escribir esta palabra con corrección, y es: benignidad. El término venignidad simplemente no aparece en el diccionario de la RAE.
Con el fin de que te sea más fácil recordar la forma en que deberías escribir benignidad, queremos aportarte su definición del diccionario:
Desearíamos asimismo, recomendarte una práctica muy conveniente para que recuerdes siempre cómo se escribe de forma correcta la palabra benignidad, y nunca más vuelvas a dudar entre sí este término se escribe con ‘b’ o con ‘v’. Se trata de formar una frase simple con el término benignidad, incluyendo al final de la misma ‘con b’ o ‘con v’, dependiendo de si la forma correcta de escribir el término es con ‘b’ o con ‘v’. De esta manera lo recordarás siempre, puedes darlo por seguro.
Si va delante de las letras ‘r’ o ‘l’
brillar, británico, blandir, bíblica, abatible, abrazar.
En el caso en que justo antes nos encontramos con la ‘m’
bombón, bombín, cambiar, alambicado.
Si nos encontramos con los prefijos bi-, bis-, sub-
bidente, bisabuelo, subsanar
Cuando las palabras empiezan por bur-, bus-
burdel, buscabullas
En aquellas palabras que acaban con -ble, -bilidad, -bundo, -bunda.
hablé, fiabilidad, abunda, abundó.
EXCEPCIONES: movilidad, civilidad, que son derivados de móvil y civil
Cuando una palabra empieza por bien- o lo hace por la forma latina bene-, siempre y cuando implique un sentido de algo positivo, bueno.
bienfacer, benévolo.
Si nos encontramos ante un pretérito imperfecto de los verbos de la primera conjugación, aquella que acaba en -ar. Además esto también pasa en las formas verbales de ‘ir’ en pretérito imperfecto
dibujaban, íbamos contábamos.
En los casos en que se trata de una forma verbal, cuyo infinitivo finaliza en -buir, -bir, -ber.
contribuyen, atribuirás, recibo, había.
EXCEPCIÓN: hervir, servir, vivir, ver, absolver, atrever, prever, volver, mover y sus derivados.Cuando sigue a de ‘b’, ‘d’ y ‘n’.
subvencionadas, convidado, adviento.
Si la palabra empieza por eva-, eve-, evi-, evo-.
eventos, evitaré, evolucionado, evaporación.
EXCEPCIÓN: ébano, ebanista.
Cuando una palabra comienza por di-, le-, sal-, cla-.
levantar, clavelina, diversión, salvado.
EXCEPCIÓN: La palabra ‘dibujar’ y sus derivados.
Si nos encontramos con una palabra que empieza por vice-, villa-, div-
viceversa, villano, divulgadora.
EXCEPCIÓN: billar, bíceps, dibujo y sus derivados
En los casos en los que hablamos de adjetivos que finalizan en -avo, -ava, -evo, -eva, -ivo, -iva
lesivo, onceavo, nueva, viva, nuevo, nocivo.
En aquellos casos en que las palabras que terminan en -ave, -eve. Excepto las de origen árabe
llueve, suave.
Cuando la palabra es alguna de las formas del pretérito de indicativo y de subjuntivo de ‘tener’, ‘andar’ y ‘estar’.
anduviésemos, estuvieron, tuviesen.
Cuando la palabra consiste en alguna de todas las formas del presente de indicativo, imperativo y subjuntivo de ‘ir’.
ve, vayáis.
Cuando sigue a ol-,
olvidados empolvar.
Confundir cuándo se debe escribir entre ‘b’ y ‘v’ es una de las faltas más usuales en castellano. Ese es el motivo por el cual muchas personas titubean, y no saben si lo correcto es escribir benignidad o si lo correcto es escribir venignidad. Si profundizamos un poco, no tardamos con encontrarnos con que esta confusión entre las letras ‘b’ y ‘v’ ya pasaba en el latín vulgar y en aquellas lenguas romances derivadas de él.